Ya más de una vez hemos analizado las diferencias entre el 4G y el 5G, y hoy es noticia que una de las compañías que más está haciendo por el despliegue de estas últimas redes, Huawei, haya logrado establecer una conexión en el punto más alto del planeta. Sí, en el Monte Everest. Ni más ni menos.
El hecho es que, gracias a una colaboración comercial con el operador China Mobile, y en medio de los festejos por los 60 años del primer ascenso documentado al pico más alto del mundo, ambas firmas han instalado la estación base 5G más elevada, a una altitud de 6.500 metros sobre el nivel del mar.
Considerando que el Everest está catalogado como la mayor cumbre mundial con sus 8.848 metros, el disponer de redes de alta velocidad a una distancia no demasiado lejana de allí, ayudará también a la realización de estudios que se realicen para conocer más a fondo la zona, según se ha comentado.
Claro que esta nueva estación no es la única, sino que también se han realizado otras instalaciones ubicadas a los 5.300 y 5.800 metros, de forma que prácticamente no habrá momentos en los que los científicos y escaladores se queden sin señal durante su subida o bajada.
En cuanto a las tecnologías utilizadas, desde Huawei han explicado que «el sistema 5G AAU está altamente integrado en un tamaño compacto, lo que facilita su implementación e instalación. Se adapta particularmente bien a la infraestructura en entornos extremos como el Everest».
Y, consultados sobre la velocidad que se alcanza en estas zonas tan poco propicias, los responsables del proyecto han señalado que, en la base a 5.300 metros, se registra una velocidad de 1,43 GB, lo que es un registro excelente considerando lo excepcional de la iniciativa.