Las mejores cámaras de seguridad WiFi para tener un hogar inteligente y seguro

Uno de los mayores beneficios de tener una casa inteligente es podemos ser capaces de saber lo que está pasando cuando realmente no estamos allí. Si tienes un perro o un gato como animal de compañía, o unas joyas que guardas como oro en paño, tener una cámara de seguridad será una gran herramienta para mantener controlado el territorio durante la parte del día que no estás en él.

Aunque las capacidades varían de un dispositivo a otro, las cámaras de seguridad permiten monitorear lo que está pasando en en el lugar en el que las tenemos colocadas a través de video en directo, o grabado. Pero no todas las cámaras tienen las mismas características y funcionalidades. Algunas tienen alarmas y pueden enviar notificaciones cuando detectan alguna actividad fuera de lo normal, otras ofrecen audio bidireccional, las hay que están diseñadas para vigilar a los bebés y también incluso que funcionan como centros de automatización completos.

 

 

Hemos ojeado muchas de las cámaras de vigilancia domésticas que podemos encontrarnos en el mercado, por lo que sabemos lo que es más importante tener en cuenta a la hora de ir a comprar una. Por ejemplo, lo más inportante es que sea un cámara fácil de configurar y usar. Además, una de las primeras cualidades en las que nos fijamos es es su diseño. Tiene vital importancia que sean bonitas, pero a la vez discretas. Es importante que la cámara se vea como un dispositivo que realmente quieres tener en casa, pero dependiendo de tus necesidades, es posible que no quieras que destaque demasiado.

El soporte del dispositivo también es crítico. Muchas cámaras permiten conectarse a ellas desde cualquier lugar, ya sea mediante una aplicación del fabricante que tengamos instalada en nuestro smarphone, o a través de un navegador web. Las características adicionales varían de una cámara a otra, y cada uno de los principales modelos del mercado tiene su punto fuerte en una funcionalidad.

 

Factores a tener en cuenta

 

Éstos son algunos otros factores importantes a considerar al comprar una cámara de seguridad en casa:

 

El objetivo

 

A pesar de que, generalmente, la resolución estándar para las cámaras wifi es 1080, y no es fácil encontrar en el mercado dispositivos de este tipo que emitan en 4K, hay algunos modelos con sensores de mayor resolución. Pocas cámaras de seguridad domésticas tienen lentes de zoom óptico. La mayor parte de las que podemos encontrar en el mercado tienen zoom digital. Cuanto mayor número de megapíxeles tenga un sensor de la cámara, mayor podrá ser el nivel de zoom ampliado con el que podamos continuar viendo las cosas con claridad.

 

 

A parte de la resolución, hay que tener en cuenta también el campo de visión. Todas las cámaras de seguridad tienen lentes con gran angular, pero no todos los ángulos son iguales. Dependiendo del campo de visión de la lente se podrá ver entre los 100 y los 180 grados. Este es un rango elevado para una cámara de visión común. Si deseas controlar un gran área, deberás considerar adquirir una cámara con un campo de visión muy amplio.

 

Colocación

 

Si quieres poder echar un ojo a las habitaciones de tu casa tienes un montón de opciones para llevarlo a cabo. Si, por el contrario, lo que quieres es controlar la calle, un patio trasero, o el porche de tu vivienda, será necesario que seas más exigente. No todas las cámaras de seguridad caseras son lo suficientemente resistentes como para poder ser colocadas al aire libre. Necesitarás una cámara que sea impermeable y pueda soportar la lluvia, la nieve y el sol, además de sobrevivir a las temperaturas extremas que puede hacer en verano o en invierno. Los modelos Nest Cam Exterior y Netgear Arlo Pro son dos opciones destinadas específicamente para su uso en exteriores, mientras que la Cámara de seguridad Nest de Interior y la  cámara Netgear Arlo pudieran no sobrevivir a un día de lluvia si la montas en la puerta de casa.

 

Conectividad

 

La mayoría de las cámaras de seguridad utilizan WiFi, pero no todas dependen exclusivamente de esta característica. Algunas añaden la tecnología Bluetooth para permitir el control local, así como una configuración más fácil a través de nuestros teléfonos inteligentes, Otras, por el contrario, incorporan estándares independientes de redes de automatización del hogar para poder interactuar con otros dispositivos, tales como ZigBee o Z-Wave. En la mayoría de las cámaras, lo único que necesitarás hacer es seguir las instrucciones de una aplicación para poder conectarlas correctamente a tu red doméstica.

 

 

Una vez que la cámara esté conectada, es casi seguro que podrás acceder a ella a través de un smartphone o tablet. La gran mayoría de fabricantes ponen a nuestra disposición aplicaciones móviles con las que poder gestionarlas remotamente. Otros, además, tienen portales web que agregan flexibilidad para que podamos acceder a los videos y alertas desde cualquier lugar.

 

Almacenamiento en la nube

 

En los últimos años la tendencia pasa por derivar los contenidos hacia un almacenamiento en la nube. Los videos que grabe tu cámara probablemente no se almacenarán en la propia cámara. La mayoría de las cámaras de seguridad domésticas utilizan servicios en la nube para almacenar y ofrecer acceso remoto a imágenes y otros contenidos. Algunos modelos cuentan con ranuras para poder insertar tarjetas microSD, de modo que puedas extraer físicamente el video de ellas cuando quieras revisar las imágenes.

 

 

Ten en cuenta que no todos los servicios en la nube son iguales, incluso para la misma cámara. Dependiendo del fabricante, la cámara de seguridad almacenará diferentes cantidades de material durante diferentes longitudes de tiempo. Este servicio significa, a menudo, tener que contratar una suscripción de pago en el servicio correspondiente, aunque algunas cámaras ofrecen almacenamiento en la nube libre hasta un cierto volumen de datos almacenados.

 

Precio

 

Como habrás podido comprobar en los diferentes modelos que aparecen distribuidos por el post, el coste de todas ellas se sitúa entre la franja de los 180€ y los 250€. Te puede parecer un precio caro, pero con la tecnología y funcionalidades que presentan este tipo de modelo que hemos seleccionado , serán una excelente opción a comprar cuando quieras adquirir una.